La Conferencia Episcopal Venezolana rechazó y calificó de hostil que la Policía de Nicaragua haya ingresado a la fuerza en el Palacio Episcopal de la Diócesis de Matagalpa y se llevara preso al obispo Rolando Álvarez.
En en un comunicado que publicó el viernes, 19 de agosto, la Conferencia episcopal deplora los acontecimientos que no solo son expresión de una actitud hostil hacia la Iglesia Católica, sino del grave deterioro del Estado de Derecho y de las garantías ciudadanas que sufre Nicaragua. Unimos nuestras voces a todos los que exigen a las autoridades nicaragüenses el respeto de la vida, integridad y salud de todos», dice. Los obispos recalcan que se debe preservar los derechos ciudadanos de movilización, expresión de las propias opiniones y las garantías de libertad de culto y religión.
A Rolando Álvarez, de 55 años de edad, obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí, la Policía Nacional lo acusa de intentar «organizar grupos violentos con el propósito de desestabilizar al Estado de Nicaragua y atacar a las autoridades constitucionales». Le cobran haberle dado refugio en las iglesias de Matagalpa a los opositores que huían de la criminal persecución de la policía de Ortega en 2018.
Oraciones y rezos por los católicos de Nicaragua
«Los hemos acompañado en la oración pidiendo a Dios por la pacífica superación de la situación de inquietud y tensión generada por el cierre de medios de comunicación, salida de religiosas, suspensión de actividades eclesiales, detención de sacerdotes y una actitud permanente de enfrentamiento con algunos miembros del episcopado», continuaron.
Asimismo, invitaron a todos los sacerdotes y diáconos, religiosos y fieles laicos de Venezuela a perseverar en la oración por la Iglesia en Nicaragua.